Parece que el asiático anda día y noche con una sola cosa en la cabeza, cómo convencer a su novia para que la deje correrse en su boca. Por eso se corrió en sus sueños, no tuvo el valor de hacerlo en la vida real. Y tuvo suerte.
Nirav| 22 hace días
¡Tal sensación de que ambos son sólo jugando para el público!
Parece que el asiático anda día y noche con una sola cosa en la cabeza, cómo convencer a su novia para que la deje correrse en su boca. Por eso se corrió en sus sueños, no tuvo el valor de hacerlo en la vida real. Y tuvo suerte.
¡Tal sensación de que ambos son sólo jugando para el público!